La espera se
encarna en mis pechos/
no es una
sola
sino muchas
lunas luces y sombras
que asoman
en la mañana argentina
mientras
observo los puentes de ti
la espera es
una gota de sal
que cae
lentamente por mi espalda
el tiempo se
pierde en el tiempo
y te veo
llegando
besando como
un lobo
los rincones
de mi cuerpo
llegas
y traes una
música con pájaros donde
te amo
libremente sobradamente desnudamente
y nos reímos
como bestias
muertos de
esa ternura encantadora
la espera es
el silencio que me rodea
los relojes
que caen secos en el otoño
la llovizna
muda de abril
¿cuántos
corajes se necesitan para quererte así?
y lo que es
peor
¿cuántos
corajes se necesitan para esperarte así?
en un abismo
de piedra
por donde
muy probablemente no llegues
¿y qué
maravillosa organización social del coraje
exige esta
ausencia de vos?
así se pasan
los días
y los junios
se van a acumular
en la
ventana y en mis ojos/
imparcialmente
diré que en la espera
envejece mi
juicio
mi viento
mis tetas
sin vos
que ausente
sos
fruta madura
que amo por
siempre
que no podré
comer.
ína ~